Hay momentos, en mi más sincera opinión, en los que confundimos el mailing con la actividad en redes sociales.
El caso que se me dio hace relativamente poco tiempo fue el de una petición por mail de apoyo a un premio. Desde mi punto de vista, este tipo de campañas son mucho más de redes sociales tipo facebook o twitter que de un mail.
A día de hoy, el mail se utiliza principalmente como fuente de comunicación B2B o bien como gestor/inbox de entrada de tareas, de modo que, ante un mail de este tipo ocurren, en el mejor de los casos, dos cosas:
1 - Lo abres (la mayoría de las veces no…)
2 - Te indignas y lo borras sin leer.
Esté bien, está bien… ¿Y qué pasa con las news letters? Pues primero, que te suscribes por que quieres, con la facilidad de darte de baja si no te interesa y segundo, que de ante mano sabes lo que vas a recibir, ya sea información o publicidad.
Un problemilla extra que vino con el susodicho mail fué que NO había nadie en CCO... con lo que el punto 2 aumenta proporcionalmente al número de direcciones que ves...
Aún así, un alma caritativa se paró, lo comentó y le informó de la problemática con la LOPD, pero no fué suficiente… volvió a repetir! #BIGFAIL...
Publicar un comentario